GOLPE A LA CÁTEDRA: MIEMBROS DE IRON MAIDEN VAN A LA VIRGEN
A 17 años de haber sido impedidos de tocar en Chile por sus supuestos mensajes “satánicos”, dos de sus músicos demostraron que tales historias no eran más que cuentos de brujas.
SANTIAGO, marzo 24.- El día después de su concierto en Santiago, el grupo británico Iron Maiden se tomó su tiempo de relajo, habiendo culminado su tour mundial «Somewhere back in time». La gira tuvo un broche de oro la noche del domingo en el Club Hípico y el lunes los músicos se dedicaron a diversas actividades de distendimiento.
La más llamativa fue la de los guitarristas Adrian Smith y Janick Gers, que dando un golpe a su imagen de aliados de las fuerzas oscuras, fueron a visitar la imagen de la Virgen en el cerro San Cristóbal.
Recuérdese que hace 17 años, en 1992, Iron Maiden iba a dar su primer show en Chile, revolucionando a los metaleros de la época, que no estaban acostumbrados a que vinieran grupos de esa índole. Lamentablemente para ellos, se armó una campaña digna de la Inquisición en que sectores conservadores dejaron sin recinto a los británicos, escudándose en sus mensajes supuestamente “satánicos” que inducirían a la perversión de la juventud, y usando como argumento las líricas de canciones como “The number of the beast”. Finalmente no pudieron tocar esa vez y quedaron todos enojados. Cuatro años después recién pudieron hacerlo.
Por el bien de la libertad de expresión, los tiempos cambiaron y ahora ya acumulan cinco presentaciones en suelo nacional, cada una mejor y más masiva que la anterior. Para contrastar aún más con esa chapa de grupo identificado con el reino de las tinieblas, los guitarristas se constituyeron en uno de los íconos religiosos más emblemáticos de nuestra capital. Impensado para los que creían que poco menos que tenían un pacto con el demonio.
El resto de los miembros también se relajó en distintas actividades. El cantante Bruce Dickinson fue a hacer karting, el bajista Steve Harris jugó tenis en el hotel Sheraton y el baterista Nicko McBrain se la pasó jugando golf en un club de La Dehesa.
El grupo se va mañana miércoles del país, a bordo del avión privado manejado por Dickinson, que aparte de cantante de heavy metal es piloto profesional e historiador.
Los autores de “2 minutes to midnight” anunciaron su regreso a estos lados para el 2011, cuando ya tengan un nuevo disco bajo el brazo. Así lo prometió el vocalista al finalizar su show el domingo. Y hasta ahora, todo lo que ha dicho en esas circunstancias las veces anteriores se ha cumplido.
Fuente: Terra